top of page

¿Por Qué Tu CV y Tu Perfil en LinkedIn Podrían Estarte Costando Oportunidades Laborales?

  • 14 ago
  • 2 Min. de lectura


Enviás decenas (o cientos) de currículums y visitas a tu perfil de LinkedIn, pero las llamadas nunca llegan. No se trata solo de experiencia: muchas veces, la forma en que presentás tu trayectoria marca la diferencia entre pasar desapercibido o destacar ante reclutadores.




1. Falta de claridad en cómo describís tu rol

Las empresas buscan resultados, no solo tareas realizadas. Si tu descripción profesional se queda en "Responsable de ventas" o "Encargado de proyectos", estás dejando pasar una oportunidad crucial. Incorporá métricas concretas: “Aumenté ventas en un 40 % en seis meses”; “Lideré un proyecto que generó $100 000 en ingresos”.




2. Repetición de clichés sin contenido relevante

Expresiones como “orientado a resultados”, “proactivo” o “trabajo en equipo” abundan, pero no dicen nada. Es mejor sustituir esos lugares comunes con casos reales: contá cómo resolviste un problema específico, gestionaste una crisis o mejoraste un proceso.




3. Sobrecarga de información (más no siempre es mejor)

Tener un perfil completo es valioso, pero si incluís cada detalle sin filtro, perdés la atención. Identificá tus logros clave y presentalos de forma estructurada: un resumen poderoso, experiencias clave y habilidades que reflejen tu valor diferencial.




4. Presentación impersonal o genérica

En LinkedIn, es común conectar y dejar el perfil “tal cual”, sin añadir una dosis de personalidad. Usá un extracto que te represente, contá tu historia, explicá por qué hacés lo que hacés. Un enfoque personal activa conexión emocional y genera mayor engagement.




5. Inconsistencia entre CV y perfil profesional

Si tu CV y tu LinkedIn no cuentan la misma historia, los reclutadores pueden dudar de tu atención al detalle. Asegurate de que ambos documentos reflejen tus roles, logros y fechas de manera coherente. Si tu perfil online resalta algo que el CV no, clarificalo en el mensaje o presentación.




6. Fotografía o formato poco profesional

Puedes tener el mejor contenido del mundo, pero una foto informal o desalineada puede perjudicar la primera impresión. Ir a lo seguro: presentate con una imagen limpia, profesional y acorde a tu área. Los formatos también importan: espacios bien usados, tipografía legible y estructura clara.




¿Cómo revertirlo y empezar a recibir esas llamadas?

  • Observá cómo otros perfiles en tu industria describen sus roles exitosamente y tomá nota de lo que comunican (resultados, cifras, impacto).

  • Simplificá tu narrativa, priorizando lo más relevante. Eliminá lo redundante y profundizá en los logros clave.

  • Poné el foco en resultados, respaldo con cifras, casos concretos y testimonios de impacto (si los tenés).

  • Usá lenguaje preciso y evocador, olvidate de frases hechas y mostrá lo que realmente sabés hacer.

  • Revisá cómo contás tu historia visualmente: que tu foto, encabezado, extracto y experiencia presenten una propuesta coherente.



Conclusión: Si tus candidaturas no generan respuestas, es momento de revisar la forma en que presentás tus conquistas profesionales. Optimizar la descripción de tu experiencia, dar visibilidad a tu impacto y comunicar de forma auténtica puede transformar “nunca me llaman” en “me contactaron al día siguiente”.

1 comentario


Ya me pongo a ello.....🍓🍓🍓🍓🍓

Me gusta
bottom of page